La alcaldesa Colacau, una auténtica déspota que, como ostenta el patrimonio de la verdad y es la quintaesencia de los valores, tiene a la ciudad sometida a sus gustos.
Se ha dedicado a hacerle la vida imposible a los restaurantes de Barcelona, ha querido cobrar tasas abusivas a los que tienen dos pisos, prevaricando a sabiendas que no tenía competencias para ello. Lleva el metro de Barcelona meses haciendo huelgas todos los lunes. con sus trabajadores que la aborrecen.
A los que tenemos ideología fascista persecución y asfixia, en cambio estaba dispuesta a ceder un local para una exposición de libros marxistas-leninistas. Exposición donde se presentaban dos libros, uno negando los gulags y crímenes de Stalin y otro loando el terrible comunismo albanés.
Y está semana, más rojilla ella que su propio partido Podemos, se suma a ayudar al butifarrendum y dice que está por el derecho a decidir. Pero de nuevo a los dos o tres días saca a relucir su tiranía y partidismo, cuando se entera que un local municipal se iba a usar para votar venezolanos contra la cazicada de Maduro y, claro, el derecho a decidir ese que ella promueve… es a decidir, pero lo que a ella le de la gana. Aunque esta vez se ha jodido y se lo han hecho en la calle.
Por cierto Podemos que defiende el derecho a decidir, ya sabéis… a decidir lo que les de la gana.
CARLOS GARCÍA – verano 2017
OBLIGADOS A VOTAR EN LA CALLE
La podemita Colau prohíbe que se abra en Barcelona el centro para votar contra Maduro
https://gaceta.es/espana/colau-venezuela-barcelona-20170716-1231/